
Las redes sociales han tenido una enorme influencia en la evolución de las relaciones sociales y de las relaciones de amistad. Pero ¿hasta que punto suponen una devaluación de las relaciones o una herramienta que potencia las mismas?
La amistad verdadera implica lealtad e intimidad. Este concepto es único y no puede ser modificado por algo como las redes sociales. Sin embargo, la palabra “amigo” sí puede llegar a devaluarse cuando se esgrime como sinónimo de “contacto”, aunque estoy seguro de que la mayoría de los internautas distinguen ambos conceptos con claridad.
Por otra parte, el uso de redes sociales, salvo en conductas patológicas, no quita tiempo a las relaciones reales, sino que las complementa, incluso en circunstancias difíciles. Pensemos en amigos que viven en otros países, a los que vía Facebook podemos sentir más próximos que nunca.
Por eso pienso que las redes sociales son decididamente beneficiosas. Y además permiten una mayor intensidad y profundidad que otros canales de comunicación, en el intercambio de datos y recursos, por la disponibilidad inmediata de recursos multimedia como fotografías y vídeos.